domingo, 28 de diciembre de 2014

Amnesia colectiva

No recuerdo a qué hora desperté esta mañana. Miré el cielo que estaba cubierto de un color celeste asqueroso, sin nubes, el sol me estaba quemando la piel.
No recuerdo nada de lo que había echo en todo el día, o en toda la noche.
Miré mis brazos buscando rastros, moretones, rasguños, pinchazos de agujas, algo que me ayude a recordar.
Los ojos me dolían, o tal vez eran las ojeras que jamás desaparecían.

¿Había consumido algo?

Pero eso no explicaba como llegué a este bosque.

Mierda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario